domingo, 30 de agosto de 2009

Alita de pollo

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La cara de la moneda es que conoces mucha gente. La cruz es que te toca despedirte de ellos quizá para siempre. Pasarte el verano lejos de tu casa es lo que tiene. Yo tiendo a dejarme llevar por las emociones inmediatas y subir o bajar dependiendo de lo que me ha pasado en las últimas veinticuatro horas. Yo definía esta forma de ser como bipolar a corto plazo pero el otro día una amiga de toda la vida me dijo que soy visceral y creo que tiene toda la razón. A mi me cuesta definirme pero creo que visceral me viene al pelo. Soy incapaz de separar mis emociones del resto de mi ser. Si estoy contento soy la alegría de la huerta y si estoy triste quiero desaparecer. No me llaméis por teléfono asustados, no me quiero morir, me quedan muchas cosas por hacer, aún no he montado en globo. Pero triste si que estoy. Triste por la gente que se me va, por los que han hecho mi mundo un poquito más grande y que ahora al largarse me han dejado hecho unos zorros. Tampoco os penséis que me ha dejado roto el corazón un rollete veraniego al que nunca más volveré a ver. No, estoy hablando de mis compañeros de trabajo, los que han venido a currar un mes en temporada alta y ya se han largado. Los compañeros con los que me he escaqueado a fumar un piti mientras poníamos a parir al jefe, los que me han reído las gracias, los que me han hecho partirme de risa con las suyas, los que me han engañado diciéndome que no aparento la edad que tengo, los que me han dado clases de catalán, los que se han sorprendido de que en Madrid le llamemos “mini” a un litro de cerveza o “movida” a cualquier cosa, los mismos que ya piensan en sus cosas mientras yo sigo pensando en ellos. Como según mi amiga soy visceral ahora mismo me parece que sin ellos ya nada será igual pero igualmente como soy visceral mañana me pasará algo que aún ni me imagino y que me hará subir de nuevo a lo más alto o ahogarme aún más en el fondo de mi negro pozo. Me gustaría tener una maquina del tiempo y retroceder un mes para volver a conoceros a todos o avanzar once meses y con un poco de suerte volver a veros vestidos de explorador preguntándole a los turistas si quieren una foto de bienvenida sin compromiso. Me encantaría volver a escucharos mascullar entre dientes “pues que te jodan” ante la negativa de esos turistas a hacerse la foto. No tengo maquina del tiempo, solo tengo un corazoncito pequeño pero lo suficientemente grande como para albergar todo lo bueno que me encuentro. Y este verano me estoy encontrando muchas cosas buenas. Lo mejor de ser visceral es que después de estas líneas ya no estoy triste, estoy contento por haberos conocido. No me conocéis lo suficiente como para saber lo cansino que soy y la guerra que os voy a dar para que no os olvidéis de mí.
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Os dejo una canción del maestro Jacko que creo que le gusta mucho a alguien.
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kkkkkkkkkkkkkkkkkkkkk

lunes, 24 de agosto de 2009

Jason Lee

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Ni tabla de surf ni tabla de bodyboard ni na de na. Después de un exhaustivo estudio del estado de la mar he corroborado que con las olas que hay en mi playa lo más que puedo hacer en el agua es el muerto. Aquí no haría surf ni David el gnomo. Anyway el ansia de ser un guay de manual es difícil de calmar por lo que algo tengo que hacer y he tenido otra brillantísima idea. Hay algo que siempre he querido tener pero que nunca me he atrevido a comprarme, hace años porque era un gilipollas retraído y ahora porque soy un gilipollas suficientemente mayorcito como para ir por ahí haciendo el indio. Pero bueno, yo me siento un chaval, aquí no me conoce nadie y ya que todos los que si me conocen me dicen que no aparento la edad que tengo voy a seguir haciendo el Peter Pan y me voy a dar el capricho. Es posible que el capricho me cueste partirme la crisma o partírsela a quien se cruce en mi camino pero aquí tengo a mi disposición un paseo marítimo de cuatro kilómetros totalmente llanos para practicar mientras que mi pueblo es pura cuesta, además de que está lleno de gente que va a coger carrerilla para reírse de mí si me ve montado en un……monopatín. No os riáis que mañana mismo pienso comprármelo. El tema de lo que me pueda costar no es problema pues si algo bueno tiene ser un yonki es que relativizas el valor del dinero. Si en una sola noche te puedes gastar sesenta eurazos en algo del tamaño de un garbanzo que te dura un suspiro y que te mata lentamente porque no te vas a gastar cincuenta pavos en un trozo de madera con ruedas que te va a durar toda la vida. Es un argumento irrefutable. No os penséis que pretendo aprender a hacer cabriolas y bajar escaleras derrapando con la tabla por la barandilla. No, que va, quiero ser guay pero no tanto, además de que le tengo mucho aprecio a mis huevos y mi rabadilla. Me conformo con ir de una punta a otra del paseo patinando, escuchando musiquita y poniendo cara de llevar toda la vida haciéndolo. Supongo que algún día intentare hacer un oly pero ese mismo día se me quitaran las ganas de seguir intentándolo cuando un ATS me diga que me he roto el coxis. Si el tiempo que empleo en maquinar ideas peregrinas como esta lo emplease en pensar como forjarme un buen futuro seguro que otro gallo me cantaría y si mi abuela tuviese ruedas sería una bicicleta. Es lo que hay…
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viernes, 21 de agosto de 2009

La gente es gilipollas. Parte I

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Uno por uno no estamos mal pero en grupo damos bastante asco. Cuando tengo que hacerle fotos a la gente con los muñecotes del parque muchas veces me entran ganas de pedirles a los Reyes Magos un lanzallamas. No se la cantidad de veces que los auxiliares y los fotógrafos tenemos que liarnos a voces con la gente para que mantengan un mínimo orden y no se metan 5658978545265 tipos a la vez en la misma foto. Se viven escenas dignas de la cola para entrar al Arca de Noe. Una foto de tu hijo con Coco puede ser un bonito recuerdo pero nadie quiere una foto en la que además de tu hijo y Coco salen otros cuatro chavales, cada uno de su padre y de su madre, un señora gorda con una cerveza en la mano, un tipo con bigote dándole un morreo a Coco, otro tipo sin bigote poniéndole los cuernos al pobre muñeco, dos carritos de bebe llenos de compras y un empanao de espaldas a la cámara. La gente discute por conseguir ser los siguientes y lanzan a sus hijos contra el muñeco mientras los que aún están posando dicen patata. A los críos no les hace falta que nadie les empuje pues ellos solos, en autenticas jaurías, se meten en medio de la foto alucinados por el bicho peludo de dos metros. Mi frase preferida a la hora de gritar es “controlen a sus hijos por favor” que pronto se transforma en controlen a sus hijos por Dios!!!!! Lo de los críos se entiende pues con cuatro años no tienes aún muchas nociones de protocolo pero los padres ya son mayorcitos (los ingleses no tanto pues su media de edad a la hora de empezar a procrear debe rondar los quince años) como para montar la que montan. Los muñecos solo pueden estar quince minutos frente al público pues con el calor que hace y semejante pelambrera se asfixian así que es inevitable que cuando se piran a descansar dejen a más de uno compuesto y sin foto. La gente se toma esto muy bien, si, si. Da igual que les digas que Elmo volverá a salir en un rato o que les expliques el calor que pasan, a la gente se la suda y se pillan unos mosqueos de la ostia. Cuando les das la espalda y te diriges con el auxiliar y el muñeco hacia los camerinos se quedan bramando y sientes que alguien te va a tirar una piedra. Por largarse a su hora el otro día un tipo les puso una reclamación a Epi y Blas.
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sábado, 15 de agosto de 2009

Parte de guerra

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Un mes después de mi llegada a la costa ya me he mimetizado completamente con el ambiente. Bañador con orquídeas estampadas, camiseta sin mangas, pulsera tobillera, un bronceado aceptable (en las pantorrillas, los antebrazos y el cuello), las gafas de sol cosidas a la cara y las chanclas pegadas a los pies. Lo peor aún está por llegar pues estoy pensando en comprarme una tabla de surf. Los genes de San Martin de la Vega me salen por los poros y voy a tener que hacer un gran ejercicio de contención para no comprármela. No sé surfear y aquí pocas veces hay olas adecuadas para ello pero mi insensatez de flipao pega fuerte y en este momento me parece que lo mejor que puedo hacer con mi vida es comprame la tabla más barata que encuentre en el Decathlon y ver que pasa. También he pensado que antes de dejarme un pastón y descubrir que solo utilizo la tabla de surf para planchar las camisas es mejor que me compre una de bodyboard por cincuenta pavos. Si resulta que la cosa me gusta tendré más razones para dar el salto a la categoría de surfero-guay. Conociéndome es muy problable también que me olvide de todo esto y termine comprándome una colchoneta hinchable que además sirve para echarte la siesta.
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Tanto contacto en el curro con los guiris de media Europa me ha obligado a cambiar mi ranking de razas a exterminar. Los franceses han desbancado a los italianos del numero uno. Excuse moi Laurent. Después de los franceses viene los rusos. Los rusos son lo peor pero se libran del numero uno porque las piernas de sus señoras no son normales y no es cosa de exterminar algo tan bello. Os hablaría de las piernas de la rusas si se pudiese describir tanta perfección con palabras. Pero no es así. Dibujar no sé y no conozco a ninguna para poder hacerla unas fotos así que solo espero que tengáis la suerte de ver de cerca esas preciosas curvas y comprobar así que Dios existe.
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¿Por casualidad no le sobrara a alguien alguna entradilla para el concierto de Muse en Madrid en Noviembre?
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martes, 11 de agosto de 2009

I tried to give you up but I'm addicted

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Time is running out ...Muse
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I think I'm drowning
asphyxiated
I wanna break this spell
that you've created
you're something beautiful
a contradiction
I wanna play the game
I want the friction
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you will be the death of me
you will be the death of me
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Bury it
I won't let you bury it
I won't let you smother it
I won't let you murder it
Our time is running out
Our time is running out
You can't push it underground
You can't stop it screaming out
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I wanted freedom
bound and restricted
I tried to give you up
but I'm addicted
now that you know
I'm trapped sense of elation
you'd never dream of
breaking this fixation
you will squeeze the life out of me
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Bury it
I won't let you bury it
I won't let you smother it
I won't let you murder it
Our time is running out
Our time is running out
You can't push it underground
You can't stop it screaming out
how did it come to this?
ooooohh
you will suck the life out of me
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bury it
I won't let you bury it
I won't let you smother it
I won't let you murder it
Our time is running out
Our time is running out
You can't push it underground
You can't stop it screaming out
How did it come to this?
ooooohh
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kkkkkkkkkkkkkkk

domingo, 9 de agosto de 2009

Sigo vivo

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¿Como están ustedes? Yo bien. No hay una razón en particular por la que haya estado desaparecido tantos días. Hay un montón de razones pero no sé cual es la buena. Puedo echarle la culpa a los bares, como siempre. No quería estar solo todo el verano y me he pasado de frenada. He pasado muchos días apenas sin aparecer por casa, currando, bebiendo y durmiendo. No me quejo, me lo he pasado de puta madre, esta gente se esta portando muy bien conmigo, y seguiré haciéndolo pero necesito unos dias de reposo. Para ello me ha venido que ni pintada la reciente llegada de mi familia. No es que estuviese deseando que viniesen, la verdad, pero dejar de hacer lo que me salga de las pelotas en cada momento durante unos días no me va a venir mal. Lo malo es que esos días van a ser veintiuno exactamente y he pasado de ser el tipo que vive solo a el niño que duerme en el sofá. Ya estoy viendo que el primer día que vuelva a estar solo en casa lo voy a coger con tantas ganas que van a terminar viniendo los GEO. Por lo demás todo igual, ¿vosotros qué tal? Nos vemos pronto...
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kkkkkkkkkkkkkkk