Esta es otra mala noticia para mi pero una muy buena noticia para el protagonista de la misma. El otro Miguel, el Marina, se me va, se larga a Lanzarote a currar de relaciones publicas/animador a un hotel. Su trabajo consistirá en caerle bien a la gente, algo hecho a su medida..
En estos meses que llevo de vuelta en Ciempozuelos me he pasado gran parte del tiempo en la caseta del patio de Miguel. Creo que hemos recuperado mucho de lo que habiamos perdido al apenas vernos en los últimos años. En la caseta de Miguel he podido presenciar como de su cabeza salían ideas locas e ideas loquisimas pero ideas al fin y al cabo. Y he podido comprobar como es capaz de sacar adelante lo que en un principio puede sonar a cuento de la lechera. Miguel consiguió que "todo el mundo" (literalmente, puedo dar fe de ello) se enterase de que un españolito se las había apañado para subsanar sus problemas económicos con ingenio. De hecho creo que fue el "Washington Post" quien lo calificaba de "ingenioso subastero". Lamentablemente el sistema no es muy amigo de outsiders y Miguel tuvo que parar su "solución" antes de que le saliese más caro el remedio que la enfermedad...
.
Voy a echar de menos muchas cosas así que las voy a resumir en que te voy a echar mucho de menos tío. Te deseo lo mejor, porque te lo mereces. También deseo que pronto estés suficientemente bien instalado y adaptado al entorno como para recibir visitas de amigos en paro, visitas que quizá se alarguen...
.
Un abrazo fuerte Miguelín y mucha suerte..........nos vemos en Lanzarote...
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario